Operación pañal nocturno

Escribo esta entrada con retraso, porque la "operación pañal nocturno" ha sido tan natural y tan fácil que casi la he olvidado.



Al contrario del pañal diurno, para la retirada del de la noche lo que menos tenía era prisa. Lutis es de las mayores de clase, cumple en febrero y con 2 años y medio me entró la prisa más absoluta porque dejara el pañal. ¿Por qué? principalmente porque su hermana nacería en septiembre y desde luego iba a poder ayudarla poco con un bebé recién nacido en brazos todo el rato.

Así que en mayo me puse manos a la obra. Ella tenía dos años y tres meses. Pronto fue cogiendo ritmo y para el inicio de la guarde en septiembre solo llevaba pañal para la siesta.

Este pañal de siesta lo quitamos cuando cumplió 3 años, casi lo mismo que el chupete. Como ya he contado, la baja con la pequeña tuvo complicaciones con su ingreso por bronquiolitis, enfermedad que arrastramos hasta casi mayo, por eso, el pañal nocturno no me preocupaba.

Con la llegada del calor mi chica grande empezó a pedir no ponerse el pañal de noche porque le molestaba. Para mí fue una gran sorpresa, pero simplemente me dejé llevar acompañándola hasta agosto que lo dejó por completo.

En estos meses, en especial al principio, tuvimos algunos escapes que hicieron que retrocediera y empezará de nuevo a pedir el pañal. Lejos de regañarle tanto su padre como yo, le explicábamos que no pasaba nada y si pedía pañal se lo poníamos porque le daba seguridad. Si por la mañana el pañal estaba seco, celebrábamos con el baile del pañal seco. Celebrar mucho los logros de los pequeños hace que aumente su seguridad. Y así, poco a poco, cogió la confianza suficiente para controlar esfínteres también por la noche.

Contadme cómo fueron vuestras operaciones pañal. :)

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